Señor Ruster, al principio simplemente tenía una idea para un producto innovador. Ahora ya está desarrollando un prototipo. ¿Cómo ha sido su experiencia con el InnoFunnel de Rohde & Schwarz?
El primer paso fue presentar mi idea de manera bastante informal al equipo de InnoFunnel. Desde entonces, el equipo estuvo a mi lado para ayudarme y se encargó de muchos trámites organizativos que habrían sido difíciles de ejecutar para mí como empleado individual. Se trata, por ejemplo, de encontrar los contactos adecuados para compartir conocimientos técnicos o determinar la demanda potencial de los clientes para mi concepto. Luego tuve la oportunidad de presentar mi idea a un público muy numeroso en la conferencia internacional de desarrolladores y al InnoBoard, formado por ejecutivos de alto nivel. Al InnoBoard le encantó mi idea, y viene promoviéndola desde entonces. Esto me permitió dedicar parte de mi horario laboral a la idea y recibir el apoyo continuado de los compañeros del InnoFunnel. Finalmente, desarrollamos un concepto para determinar el potencial y el coste de un prototipo. Durante esta fase también trabajamos, entre otras cosas, en definir un estudio de viabilidad, realizar una búsqueda de patentes y detallar los aspectos técnicos.
¿Cuál fue el mayor desafió en este proceso?
Para seguir desarrollando el concepto he tenido que revisar a fondo varias veces el enfoque tecnológico. Es lo que pasa con la innovación: uno topa continuamente con desafíos y problemas técnicos con los que no contaba. A veces pensé que los problemas eran tan graves que no valía la pena insistir en la idea, pero por suerte siempre he acabado encontrando soluciones. Eso es lo que me motiva para seguir adelante.
¿Qué fue lo que le ayudó a recorrer este proceso de innovación tan rápidamente?
De entrada, es importante que exista un proceso de innovación específico, ya que de lo contrario algunas buenas ideas pueden perderse por el camino y acabar abandonadas. Otro factor crucial es disponer de una red dentro de la empresa, algo que conseguí crear con la ayuda del equipo de InnoFunnel. En un plazo de tiempo muy breve conocí a una cantidad increíble de compañeros que también me apoyaron de manera muy entusiasta. Una manera supereficaz de crear una red.
Esta red también le ayudó a encontrar una potencial aplicación para su idea.
En efecto. Yo, personalmente, trabajo en la división de test y medida. Sin embargo, mi idea tiene una aplicación que va dirigida a los clientes de otra división. Desde el primer momento, el interés se ha centrado no solo en la tecnología, sino también en beneficiar a los clientes. Hemos colaborado entre diferentes divisiones de una manera original y nada rígida. Eso también es una parte importante de la cultura de empresa enfocada a la innovación de Rohde & Schwarz.
Muchas gracias por hablar con nosotros, señor Ruster. Estamos ansiosos de ver cómo se va concretando su innovación y le deseamos toda la suerte del mundo.