Sus necesidades de medida para NTN
La transición a las NTN, especialmente en el contexto de los futuros sistemas 6G, presenta una serie de desafíos únicos y complejos que van mucho más allá del ámbito de la validación de las redes terrestres convencionales. Uno de los mayores retos es emular las condiciones dinámicas y complejas del canal radioeléctrico de satélite. Los satélites de órbita terrestre baja (LEO) operan a velocidades extremas, y esto provoca numerosas anomalías muy difíciles de reproducir en una configuración de laboratorio. Por citar algunos ejemplos, puede tratarse de desplazamientos de frecuencia Doppler considerables, retardos largos y muy variables en la propagación, que repercuten en el rendimiento de las aplicaciones en tiempo real, pérdidas por propagación notables y fenómenos atmosféricos de desvanecimiento impredecibles, como los que provocan las precipitaciones.
Otra tarea fundamental es la gestión de protocolos de movilidad complejos. La huella geográfica limitada de los satélites LEO exige traspasos frecuentes y sin interrupciones entre haces adyacentes y de un satélite a otro. El correcto desarrollo de este proceso depende de la disponibilidad de datos de efemérides exactos en tiempo real para prevenir interrupciones en el servicio. Además, la interoperabilidad ininterrumpida entre los segmentos de la NTN y la red terrestre constituye un importante desafío desde el punto de vista de la arquitectura. Por último, la naturaleza altamente dinámica del entorno de operación plantea dificultades a la hora de obtener medidas fiables de los indicadores clave de rendimiento (KPI) y el subsiguiente análisis de causas raíz, puesto que la degradación del rendimiento puede ser consecuencia de muy diversos factores interdependientes y variables.