Cuando todo funciona: una conducción modelo
Durante la noche, nuestro automóvil se ha actualizado con el software más reciente por medio de redes móviles y ya está listo para su próximo recorrido, ahora con nuevas características. Nuestra conducción modelo automatizada empieza con el ingreso del destino en la computadora de a bordo, la cual primero obtiene el mapa actualizado y la información sobre el tránsito enviada por la red. La calle Beethoven está bloqueada a causa de un accidente que acaba de ocurrir, accidente del que los vehículos implicados han informado de manera automática, y por lo tanto se evita. El tránsito por el centro de la ciudad fluye sin mayores embotellamientos porque el centro de control tiene un panorama general de toda la situación del mismo, y optimiza las fases del semáforo. El reinicio del automóvil cuando una luz roja cambia a verde se orquestó remotamente. El semáforo («unidad lateral en la vía») indica de manera inalámbrica el cambio a verde.
El primer vehículo («host») se hace cargo e inicia una cadena inalámbrica V2V a lo largo del tránsito detenido, y empieza a incrementar la velocidad de manera controlada. Dos calles más adelante, ocurre un incidente crítico: un peatón intempestivamente ingresa en la pista, lo que obliga a un automóvil a realizar una parada automática de emergencia. Una señal V2V enviada de manera simultánea por el automóvil al tránsito detrás de él, incluyendo nuestro vehículo, provoca la misma reacción en todas partes en cuestión de milisegundos, por lo que el incidente no tiene ningún efecto negativo en el tránsito. Tomamos la vía de acceso hacia la concurrida autopista de la ciudad. Nuestra computadora de a bordo informa a los vehículos que están cerca de nosotros que deseamos unirnos y utiliza el espacio que entonces crean. Poco después, se crea un carril de rescate como por arte de magia, porque un vehículo de emergencia está aproximándose. Esto se debe a que el centro de control alertó a todos los vehículos que se encontraban a lo largo de la ruta por medio de comunicaciones móviles.
Llegando a nuestro destino buscamos un espacio en el estacionamiento y le dejamos todo el procedimiento al sistema de gestión del estacionamiento, el cual dirige nuestro automóvil al siguiente espacio libre, en donde se estaciona por sí solo. Una señal de aviso hará que esté disponible nuevamente después de nuestra salida.